Reciclar es cosa de ricos
Reconozco que soy algo obsesivo con el reciclaje. Me encuentro en ese
grupo de españoles, escaso todavía, que hemos tomado conciencia del profundo
deterioro que se está produciendo, ante la desoladora visión que, actualmente, nos
proporciona, nuestro medio natural. Especialmente en el ecosistema marino. Sé
que no es fácil conseguir implicar a buena parte de la sociedad en esta
cruzada. No es probable que lo entiendan, y, mucho más difícil, que lo
practiquen. Pero lo que, si podemos hacer, tomándolo como uno de nuestros retos
más inmediatos y fáciles de implementar, es la transmisión de información y la
sensibilización de todos aquellos amigos, familiares y colaboradores que se
encuentren en nuestro entorno social.